filloas de calabaza o en gallego Chulas de calacú
Os propongo una receta super sencilla que, al menos e mi casa se lleva haciendo desde que tengo uso de razón. Se trata de las filloas de calabaza o como las llámanos nosotros chulas de calacú. Imagino que muchos no sabréis ni lo que es un calacú, ni una botefa y estas palabras os sonarán a chino. Pues bien, botefas y calacús son tipos de calabas y les llamamos así en la zona del Morrazo (desconozco como se le llama en otras zonas de Galicia). Puede que en otras zonas se les conozca como fritos de calabaza.
Esta receta es un clásico en la cocina de mi abuela, sobre todo en esta época, que es cuando estas verduras están maduras. Ella las lleva haciendo toda la vida, y antiguamente era una forma de llenar la barriga bastante buena.
Vayamos con los ingredientes con las filloas de calabaza:
(las cantidades son orientativas)
-Tres huevos de casa.
-Como tres cuartos de quilo de calacú. Bien valen las calabazas naranjas del super.
-Un poco de harina.
-Aceite para freír.
-Azúcar al gusto y canela.
Lo primero es pelar y trocear el la calabaza o el calacú y ponerlo a cocer en agua. Si lo troceáis pequeño se os cocerá antes. Una vez cocido y escurrido conviene dejarlo enfriar un poco.
El calacú o calabaza después de cocido y machacado con el tenedor.
Luego lo machacáis bien con un tenedor y cuando esté bien triturado le añadís los huevos y seguís batiendo bien la mezcla hasta que esté bien homogénea. En este punto, convienen añadir un poco de harina, como tres cucharadas soperas. Así conseguimos espesar la mezcla un poco para que no se nos desparrame todo cuando lo vayamos a freír. También podéis echar un poco de azúcar, eso a vuestro gusto.
La mezcla de calacú, huevo harina y un poco de azúcar lista para freír.2
Ponéis una sartén al fuego, con un centímetro de aceite más o menos, y cuando esté caliente, con una cuchara de sopa, vais poniendo pegotes de la masa previamente preparada. Conviene estirarlas un poco y darles forma mientras aun no comienzan a freírse. No o recomiendo que las dejéis demasiado finas, ya que se quemarán más fácilmente y quedarán menos jugosas.
Una vez fritas por un lado, dais la vuelta y a freírlas por el otro. Las podéis tostar más o menos a vuestro gusto!!
Las filloas o chulas listas para dar la vuelta en la sartén.
Al sacarlas de la sartén, ponerlas en un plato con papel absorbente, ya veréis la cantidad de aceite que absorben. Yo en realidad las pasé por dos platos con papel para quitarle lo más posible el exceso de aceite antes de pasarlas a la fuente donde las presenté.
El resultado final, un plato de filloas o chulas listas para comer.
Tras este último paso, solo os queda preparan un chupito de vino dulce y degustar vuestras fantásticas filloas. Ah, si os gustan bien dulces, probad a espolvorear un poco de azúcar por encima o darles un toque de canela.
Buen provecho!